Cuando era pequeña, mi madre siempre estaba cosiendo, bordando, tejiendo o haciendo crochet. En las largas tardes de verano y algunas de las de invierno siempre quería que me enseñara a hacer lo que ella estuviera haciendo. Y ella fue la que me enseñó a tejer y a bordar y a hacer crochet. Con el paso de los años he ido dejando de hacer esas cosas casi siempre por falta de tiempo.
Pero hace poco he redescubierto el crochet. Aún no soy capaz de hacer cosas grandes, aunque ver las preciosidades que hace Tortugas de colores me ha dado envidia. También Olivia hace unos amigurumis preciosos, para los cuales creo que nunca tendré la paciencia suficiente.
Precisamente fue en el blog de Olivia donde vi hace un montón de tiempo estas preciosas flores de cadeneta. Ella las hace con cintas y materiales reciclados y quedan espectaculares. La mía la hice con hilo de algodón, comprado hace tanto tiempo que perdió la vitola y no sé ni de qué marca es. El centro está hecho con hilo amarillo mezclado con hilo de bordar finito de color marrón, para que recuerde aún más a un girasol. Por detrás lleva un imperdible, cosido y sujeto con un trocito de fieltro naranja. Para que no se arruge, le echo de vez en cuando un poquito de apresto del que se usa para planchar.
La idea era hacer un collar con girasoles y cuentas de madera, para combinar con los vestidos veraniegos. Pero al final quedó en un broche, que uso para adornar mi bolso de verano, en verde pistacho, grande para que quepan todos los juguetes de mis niños cuando vamos de paseo.
3 comentarios:
¡Me parece una gran idea mezclar el hilo de tejer con el de bordar! Yo con el ganchillo no me aclaro, y mira que me encantan todas las cosas que veo hechas con ganchillo...
Yo aún tengo problemillas leyendo los patrones, pero poco a poco.
Yo no paso de hacer cadeneta, y mis sudores me cuesta! Lo demás para mí es ciencia ficción.
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